Por qué niños y niñas deben aburrirse

En esta noticia nos informan de la necesidad de que los niños y las niñas se aburran. El aburrimiento genera una sensación de vacío, que no gusta ni a grandes ni a pequeños. Y sin embargo… es absolutamente necesario.

El aburrimiento en los niños
Diseñado por Freepik – Aburrimiento

En la sociedad actual se valora mucho el estar activo. Hay que estarlo, para producir. Y para poder llegar a todo, tener todo. Este mandato que tanto nos complica la vida a los adultos… estamos repitiendo con nuestros hijos.

La sobreestimulación no es buena

Da la sensación de que si un niño o niña no hace idiomas, deporte, alguna actividad artística programada… no va a ser un adulto de provecho. Y sin embargo, lo que se está logrando es que niños y niñas estén sobreestimulados. Si nosotros no podemos llegar a todo, ellos tampoco lo lograrán. ¿Cómo van a rendir en lo académico con las agendas que tienen? Llegan agotados a casa después de toda esa actividad. Está claro que esto se hace a veces necesario ante la imposibilidad de los padres de compaginar sus horarios con los de los niños. Y además está el deseo de darles lo mejor. Pero se confunde dar lo mejor con dar todo. Dar todo nunca es posible, lo mismo que llegar a todo tampoco lo es. 

Aburrimiento y creatividad

Se hace necesario generar tiempos para el aburrimiento. Del aburrimiento absoluto surge la creatividad. Un niño o niña que se aburre tendrá una de las mejores experiencias posibles, la de crear algo. Tendrá que inventarse algo para poder entretenerse. Y esto siempre es positivo. Mucho más que el exceso de actividades y de estímulos. Si echamos la vista atrás todos podremos acordarnos de que las mejores tardes cuando éramos pequeños… eran precisamente aquellas en las que no teníamos nada que hacer. Siempre se acababa inventando algo. 

Fuente: playgroundmag.net

Para mayor información no duden en ponerse en contacto a través de este formulario. María Bilbao, consulta de psicólogo en Bilbao.

Cuando solicitar psicoterapia para un niño o niña

Cuando ir al psicólogo para un niño
Diseñado por Freepik – Cuando ir al psicólogo para un niño

Tal y como nos muestran en este artículo normalmente para cuando un padre o madre pide cita para sus hijos en el psicólogo… han intentado de todo antes. Cuesta mucho tomar esta decisión. Es comprensible. A veces los padres y madres sienten que se les va a juzgar. Sin embargo, cada niño o niña es diferente, no siempre se acierta en las intervenciones como padres. Y por otro lado… es imposible acertar siempre, porque somos humanos. Pedir ayuda y dejar que sea un profesional el que intervenga… ya es ayudar a los hijos. Niños y niñas valoran el ser escuchados y acogidos en sus necesidades. Y a veces aita y ama deben mostrar que ellos no pueden con todo, y que van a necesitar ayuda profesional.

Motivos habituales por lo que consultar a un psicólogo para niños

No hay una única razón para consultar con un psicólogo. Podríamos decir que siempre que se considere que un niño o niña está pasando un mal momento, se podría solicitar una cita. Algunos de los motivos habituales de consulta suelen ser los siguientes:

  • Los relativos al control de esfínteres.
  • Enfados, rabietas habituales.
  • Tristeza cuya razón se desconoce, o que perdura en el tiempo.
  • Síntomas de hiperactividad o de falta de atención.
  • Dificultades con la alimentación, o el sueño.
  • Miedos importantes.

Como decimos, ante la duda, es mejor consultar.

En que consiste acudir a un psicólogo

El proceso de acudir al psicólogo suele consistir en una serie de sesiones de valoración. En dichas sesiones el objetivo es poder entender mejor el motivo de consulta, y las razones del mismo. Para ello son necesarias algunas citas tanto con el menor como con sus padres o persona que estén a cargo. Una vez realizadas estas sesiones se hará la propuesta de intervención. Atendiendo a la edad de los niños se trabajará mediante la palabra, o los dibujos o los juegos.

En todo el proceso es fundamental el trabajo con los padres. Son ellos las personas que más información tienen sobre el niño o niña. Y por tanto, es importante están en coordinación constante. Solo de esta manera se podrá entender de una manera más completa los contenidos de lo que se trabaje en la sesión con el menor. Así mismo, es necesario también reflexionar con los padres sobre determinadas cuestiones implicadas en la vida del niño o niña.

Para cualquier duda sobre esta temática no duden en ponerse en contacto a través del teléfono, mail o formulario de contacto con María Bilbao, psicólogo en Bilbao.

Fuente: psicopedia.org

Cómo acompañar a los niños en el crecimiento

Aprender a acompañar en el crecimiento de los hijos
Diseñado por Freepik – Aprender a acompañar

Cuando hablamos de cómo acompañar a los niños en el crecimiento nos referimos a ese proceso de estar ahí, para lo que necesiten, pero sin hacer cosas por ellos que ya son capaces de hacer. Esto es más fácil decirlo que hacerlo.

Aprender a acompañar en el crecimiento a los hijos

Desde el momento del nacimiento, niños y niñas van adquiriendo habilidades. Una de las primeras y que más recuerdan muchos padres es el proceso por el cual terminan andando. Hay que hacer un buen ejercicio de paciencia, y de tolerancia, para permitir que los niños aprendan a andar. Paciencia porque uno les ve a punto de lograrlo… pero a veces no lo logran. Y tolerancia, porque hay que aguantar el deseo irrefrenable de ayudarles, o de protegerles en exceso. Cuando se logra acompañar a un niño en este proceso, con paciencia y tolerancia, se le habrá ayudado como necesita. Sabiendo que el ritmo de cada niño o niña es diferente.

Otro hito es el aprendizaje a comer con cubiertos. Aquí sí que hacen falta sacos de paciencia. Este proceso incluye enseñarles a coger los cubiertos, pero aguantar que no lo van a hacer bien al principio. Se llenarán de comida enteros. Mancharán la mesa, el suelo y la pared. Si logramos ir acompañándoles, parándonos a nosotros mismos ante el deseo de hacerlo por ellos… les habremos dado otra experiencia de sentir que ellos pueden hacerlo por sí mismos. Si no lo alcanzamos a hacer así… es posible que les terminemos dando la comida nosotros cuando en realidad serían capaces de hacerlo perfectamente. Es decir, estaríamos frenando su desarrollo por nuestras propias necesidades.

El error de hacer las tareas de los hijos

En los tiempos que corren es fácil acabar por hacer muchas cosas por los hijos e hijas. Es más rápido, sin duda. Y mucho más fácil. Pero con estas conductas les transmitimos la idea de que no son capaces. Y esto genera sufrimiento, porque provoca una sensación de inseguridad. La seguridad en ellos mismos es fundamental cuando se enfrenten al mundo social, para no doblegarse a los grupos, para sentirse tranquilos con sus opiniones, etc.

Todos tenemos la experiencia de haber aprendido muchísimo de nuestros propios fracasos. Deberíamos intentar hacer lo mismo por nuestros hijos. No se trata de estar impasibles frente a su frustración, sino de dosificar la ayuda.

Fuente: elpais.com

Para más información no duden en ponerse en contacto con María Bilbao, psicólogo en Bilbao.

 

La sobreestimulación en los niños

La sobreestimulación en los niños
Diseñado por Freepik– La sobreestimulación en los niños

Tal y como muestran en esta noticia en la actualidad hay una sobreestimulación a los niños.

Que es la sobreestimulación en los niños

Como hemos planteado en otras ocasiones, esto tiene que ver con la sensación que se intenta transmitir de que todo es posible. Estamos invadidos de mensajes que nos hacen creer que no hay límites. Parecería que siempre se puede tener y hacer más. Y parecería que de hecho… eso es lo deseable. Estos mensajes enganchan con nuestro deseo. Ya que el deseo está condenado a la insatisfacción plena. A los adultos nos cuesta ponernos límites. Vivimos en un mundo en el que parece que hay que llegar a todo y hay que poder con todo. Sin embargo esto es imposible.

Pero esta misma sobreexigencia se aplica a los niños. En ocasiones llevamos a niños a guarderías donde nos convencen de que son las mejores porque tienen unos planes de trabajo muy extensos, con objetivos a cumplir. No obstante, esto no es lo que necesitan los niños. Una guardería en la que sean afectuosos con ellos y las cuestiones físicas estén cubiertas… ya es bastante. Porque en realidad las únicas tareas que deberían hacer los niños tan pequeños sería la de jugar, escuchar música, y escuchar historias (cuentos). Si somos capaces de lograr esto les estaremos estimulando lo suficiente y necesario a las capacidades que tienen a esa edad. El exceso no va a lograr mayores capacidades, sino todo lo contrario.

Problemas de la sobreestimulación en los niños

Cuando se estimula en exceso a un niño, éste no puede digerir todos los estímulos. No logrará hacer el trabajo mental de poder poner todo en orden en el psiquismo. De hecho es necesario tiempo libre, sin actividad planificada, para que haya un vacío a rellenar. Los tiempos de descanso son importantes tanto para poder metabolizar todo lo vivido en el día, como para que la curiosidad, que es innata, se desarrolle.

Por tanto, se hace necesario cuidar mucho con qué actividades estimulamos a los niños. Porque en realidad, desde lo más sencillo, como puede ser darles hojas de papel y pintura, se pueden desarrollar grandes capacidades.

Para mayor información no duden en ponerse en contacto con María Bilbao, tenemos nuestra consulta de psicólogos en Bilbao.

Fuente: abc.es

La infancia y las celebraciones

Las celebraciones de cumpleaños
Diseñado por Freepik – Las celebraciones de cumpleaños

Durante la infancia, y durante toda nuestra vida, las celebraciones tienen mucha importancia. Celebrar siempre consiste en reunirse con los seres queridos por algún motivo.

En esta noticia nos alertan de que hoy en día las celebraciones están siendo bastante exageradas. Para un niño o niña es importante celebrar su cumpleaños. Sin embargo, eso no quiere decir que la manera de celebrarlo termine siendo más importante que el motivo de la celebración. Txikiparks, lasergunes, alquilar locales… son más bien actos sociales. Actualmente se está perdiendo la esencia de las celebraciones.

La importancia del cumpleaños, no de las celebraciones.

Padres y madres se vuelven locos por que sus hijos e hijas tengan las mejores fiestas. En muchas ocasiones haciendo un sobre-esfuerzo económico sin sentido. Hay una exigencia de mantener el nivel de los demás a la hora de organizar la fiesta. Por eso algunos padres y madres actualmente están haciendo fiestas conjuntas. Es difícil poder pagarlo si hay que invitar a toda la clase.

Es importante tener en cuenta lo que estamos transmitiendo a los niños y las niñas de esta manera. Les estamos lanzando el mensaje de que hay que hacer todo como los demás, o mejor. No tolerarán, por tanto, el fracaso. También les estamos transmitiendo la idea de que o se invita a todo el mundo o a ninguno. Es decir, que no les estamos permitiendo elegir. De esta forma, tampoco es tolerable el no ser invitado a una celebración. Por tanto… el no ser elegido acaba siendo un drama familiar. Y por supuesto… está muy presente la imagen hacia el exterior, transmitir una imagen de tener las mejores fiestas, etc.

Los cumpleaños «de antes».

Las celebraciones más íntimas, como se hacían antes, iban más en esta línea. Había que elegir a quién se invitaba. Uno estaba invitado a los cumpleaños de sus mejores amigos… pero no a los de otros. Así es la vida, estaremos excluídos de unas relaciones e incluídos en otras. Y algo que plantea la entrevistada de esta noticia es muy interesante. En las celebraciones más privadas… está claro cuál es el objetivo de juntarse. Estaba claro quién era el homenajeado. No es así en la actualidad.

Esta manera actual de afrontar este tipo de eventos no están inconexas con la manera en la que nuestros hijos se enfrentarán al mundo. Es importante replantearse qué es lo que queremos transmitirles.

Para cualquier otra cuestión no duden en ponerse en contacto con María Bilbao, tenemos nuestra consulta de psicología y psicoterapia en Bilbao.

Fuente: deia.com

El sueño en los niños

El sueño en los niños
Diseñado por Freepik – El sueño en los niños

El sueño en los niños es un tema siempre controvertido. En esta noticia nos hablan de la importancia de los objetos que los niños usan para irse a dormir. Los psicólogos llamamos a estos objetos «objetos transicionales». La razón es que permiten hacer la transición entre el mundo de la vigilia, y el del sueño.

Niños y niñas pueden sentir temor a la hora de irse a dormir. En muchas ocasiones el deseo de estar acompañados tiene que ver con eso. El reino de los sueños a veces les asusta, sobre todo cuando son muy pequeños. Sienten que dormir supone desconectarse de sus figuras de referencia, y les asusta.

El sueño y los miedos y temores.

Para que la transición al sueño sea lo más tranquila posible puede ser convenientes, en primer lugar, los rituales. Que los niños y las niñas sientan que tienen un horario ayuda bastante. Les da predecibilidad. Así mismo es conveniente hacer todas las noches las mismas cosas. Podría ser algo así como bañarse, cenar, leer un cuento y a dormir. Todo lo que implique que los niños y niñas sepan qué va a suceder… les calma. Por tanto, el hacer todas las noches más o menos lo mismo, produce este efecto. Leer un cuento supone, además de favorecer la capacidad de simbolizar… un momento de ir bajando el nivel de activación física.

La función de los peluches.

Centrándonos ya en los objetos transicionales… normalmente niños y niñas se suelen decantar por objetos que sean blanditos (mantitas, peluches, etc). Vuelven, de esta manera, a tranquilizarse mediante algo del orden de lo físico. Puede ser esto parecido, para ellos, al abrazo de la mamá o figura de referencia. En ocasiones son los propios menores los que deciden con qué objeto quieren irse a dormir. En otras ocasiones pueden ser los padres y madres los que elijan el objeto por ellos, sobre todo sin son muy pequeños.

La función de estos objetos es fundamental en la vida de los niños. Siendo a veces necesarios incluso en ocasiones de mucha ansiedad, como puede ser el ir al colegio el primer día de escuela, o tener que ir al hospital por alguna ocasión. Normalmente suelen ser los propios niños los que de manera natural, cuando dejan de necesitar esa función, se les olvida coger el objeto, o dicen que ya no lo necesitan.

Para cualquier duda sobre este tema pueden establecer contacto a través de este formulario. María Bilbao, psicólogo en Bilbao.

Fuente: larioja.com

Qué es la enuresis

Qué es la enuresis
Diseñado por Freepik – Qué es la enuresis

La enuresis es el orinarse sin poder avisar de las ganas o ir al WC antes. Muchos padres y madres consultan por esta dificultad en sus hijos.

Hay diferentes tipos de enuresis. Habría que diferenciar entre la enuresis primaria, que es cuando no se ha llegado a controlar los esfínteres más allá de los 5-6 años. Por otro lado encontramos la enuresis secundaria. En este caso sí que ha habido un control de esfínteres anterior. Así mismo habría que diferenciar entre enuresis diurna y nocturna. En general la enuresis suele darse más en varones.

Causas de la enuresis

Cuando un niño o niña presenta enuresis, lo primero  a realizar sería consultar con el pediatra. Siempre hay que descartar cualquier causa fisiológica que lo justifique. De no haber causas médicas evidentes… podemos suponer que tiene que ver con algún componente emocional.

En este sentido, suele haber diferentes causas, que se entremezclan unas con otras. Los niños y niñas, a pesar de la vergüenza, sienten un placer en la sensación de estar mojados. Así mismo, hay un beneficio secundario en muchas ocasiones. Y es que son los papás y las mamás los que van a cuidarle cuando se ha hecho pis. En los casos de enuresis secundaria, a veces ha habido algún hecho que ha provocado esta especie de regresión. Todos, cuando nos enfrentamos a situaciones difíciles, volvemos a respuestas que nos han servido en otras ocasiones. Los niños y niñas, cuando se enfrentan a algo que sienten que supera sus capacidades… a veces retornan a estadios anteriores del crecimiento. En estos casos la dificultad puede ser pasajera. Así mismo, y en este sentido también, a veces la enuresis tiene que ver con una sutil resistencia a hacerse mayores.

A lo largo de la historia ha habido numerosos intentos de solución de estas situaciones. El famoso pipi-stop es uno de ellos.

Ante una situación de enuresis, es necesario hacer una evaluación, para poder entender, en cada caso, las razones de este síntoma. Y en función de cuáles sean sus causas, elegir la manera más adecuada de abordarlo.

Para mayor información, no duden en ponerse en contacto con María Bilbao, psicólogo en Bilbao.

Exceso de actividades extraescolares

Exceso de actividades extraescolares
Diseñado por Freepik – Exceso de extraescolares

Tal y como nos muestran en este interesante artículo, en la actualidad niños y niñas tienen un exceso de actividades extraescolares. Indudablemente esto está influido por las necesidades de padres y madres. Muchas veces tienen que trabajar ambos a jornada completa. Las actividades extraescolares serían un recurso para poder aunar los horarios de toda la familia.

El exceso de actividades extraescolares o la necesidad de los padres

Sin embargo, los niños y niñas necesitan descansar cuando salen de la escuela. Imaginémonos por un momento que después de acabar nuestra jornada laboral, tuviéramos que volver a hacer lo mismo. Esta vez en otro sitio, con otras personas, y hasta la hora de cenar. Sería agotador. Esto mismo les pasa a muchos niños y niñas cada día.

El jugar como parte fundamental del desarrollo

Además del agotamiento físico al que están sometidos muchos niños, hay que tener en cuenta qué es lo más conveniente para su psiquismo a esta edad. Cuando somos niños, necesitamos jugar. Niños y niñas necesitan jugar. Pero no es que lo necesiten porque como son niños esto es algo que les gusta hacer (que también)… Sino que lo necesitan para poder desarrollar todas las funciones mentales. El juego es la manera en la que los niños elaboran y metabolizan su vida. Representan, en el juego, y solucionan, aquellas cuestiones que les tienen preocupados. Vemos como por tanto, no es que necesiten jugar por placer, sino que a estas edades realmente lo necesitan. Y esto es igual de importante que los estudios. Sin posibilidad de juego… las capacidades para estudiar estarán bloqueadas.

La sobreestimulación

Por otro lado tanto exceso de actividad tiene a los niños terriblemente estimulados. Y luego nos sorprende que acaben diagnosticados de hiperactividad. Es que realmente están hiperactivos, tienen un exceso de actividad. Ya hemos comentado en otras ocasiones que niños y niñas necesitan aburrirse. Tan sólo desde el aburrimiento, desde el vacío, se genera la creatividad.

Indudablemente las actividades extraescolares se pautan con el deseo de que a los niños les vaya mejor en los estudios y en la vida. No obstante, habría que intentar llegar a un equilibrio, para que no terminen siendo contraproducentes.

Para mayor información pueden contactar a través de este Formulario, en la web de María Bilbao, psicólogo en Bilbao.

Fuente: psicocode.com

La dificultad de decir NO a los hijos

¿Es dificil decir NO a los hijos?
Diseñado por Freepik – ¿Es dificil decir NO?

Muchos padres y madres se enfrentan de manera cotidiana a una dificultad: Decir NO a los hijos.

¿Es tan difícil decir NO a los hijos?

Esto es algo que parece fácil de decir. Sin embargo, se convierte en algo complicado de hacer. Sobre todo últimamente. Vivimos en la era de tener que lograr todo de manera inmediata. Parece que esto puede ser posible gracias a los logros tecnológicos. Estamos acostumbrados a cambiar las cosas en cuanto se estropean. Tampoco está bien visto dolerse por algo. Parece que hay que estar feliz en todo momento. Esto concuerda con la naturaleza humana. Los seres humanos intentamos lograr siempre el máximo de placer con el mínimo de esfuerzo y sufrimiento posible. Por eso nos cuesta decirnos a nosotros mismos que no en muchas ocasiones.

Decir NO a los hijos es necesario.

Sin embargo, sabemos que hay que hacerlo. No podemos tener todo. Y lograr decir no a los hijos e hijas es un asunto aún más complicado. Pero es absolutamente necesario para que niños y niñas se sientan bien. Cuando decimos que no a un niño, le estamos transmitiendo muchas cosas.

Le estamos transmitiendo que todo no se puede. Esto le ayudará en el futuro, cuando se tenga que enfrentar a situaciones que le demuestren que todo no se puede lograr.

A su vez, le estamos transmitiendo que él no puede todo. Le estamos librando de esa omnipotencia con la que los niños y las niñas nacen. De esta manera, cuando algo malo suceda, él sabrá que a veces es necesario pedir ayuda, porque uno no puede con todo.

Es importante poderles poner límites. Los límites estructuran la mente. Y los límites generan una serie de rutinas que son necesarias tanto para manejarse en la sociedad, como para la estabilidad interna. Sabemos que es complicado hacerlo, pero en realidad les estamos ayudando cuando lo logramos.

Para mayor información no duden en ponerse consultarnos sin ningún compromiso a través del formulario de María Bilbao, tenemos nuestra consulta de psicólogo en Bilbao.

Fuente: psyciencia.com

 

 

Exceso de medicalización de niños

exceso de medicalización de niños
Diseñado por Freepik -Medicar a niños

En la actualidad hay un exceso de medicalización de niños. Y seguramente también de adultos.

Vivimos en una sociedad en la que todo debe conseguirse cuanto antes. No hay tiempo que perder para seguir en la cadena de producción. Tenemos que consumir rápido, comprar rápido, trabajar rápido… para poder obtener todo lo que queremos cuanto antes.

Desde este punto de vista, tal y como hemos hablado en otras ocasiones, no hay tiempo para el dolor. Tampoco para la tristeza, ni para la espera, etc. Tal y como se plantea en esta noticia, estamos criando niños y niñas con una serie de características que no nos gustan. Pero muchas de estas características son fruto de la crianza. No nos referimos únicamente a cada padre y madre en particular. Sino más bien a los efectos que tienen en la crianza actual las características de nuestra sociedad.

Medicar a los niños

Un ejemplo sería la hiperactividad, tan debatida hoy en día. Por supuesto que muchos niños y niñas muestran hiperactividad. Actualmente nos cuesta también concentrarnos en una cosa únicamente a los adultos. Trabajamos mientras escuchamos música, revisamos el whatsapp y el correo electrónico, y las noticias. Esto mismo se está transmitiendo a la infancia. En momentos vitales además en que a pesar de que los niños son pura energía… no tienen energía infinita. Salen de la escuela, van a varias actividades extraescolares, y cuando llegan a casa a las 20.30 ya no se concentran para hacer deberes. ¿Nos concentraríamos nosotros?

Frente a este tipo de situaciones, y frente a cualquier circunstancia molesta… se tiende a buscar una ayuda medicamentosa. Queremos que todo se solucione rápidamente. Pero no nos damos cuenta de que algunos de los problemas tienen que ver con nuestra propia forma de manejarnos.

Medicar lo que realmente no es una enfermedad

Hoy en día se está poniendo etiquetas de enfermedades a conductas infantiles que no son enfermedades. Si se le pone el nombre de enfermedad… habrá una medicación que pueda ayudar. Pero se está viendo que la medicación, en ocasiones, lejos de ayudar, empeora la situación. Y no podemos olvidar que la infancia se caracteriza por el cambio. A veces los niños cargan con las etiquetas que les ponemos durante toda su infancia, como si fueran losas de las que no pudieran deshacerse.

Si tiene dudas sobre qué hacer ante una conducta infantil, no dude en consultarnos, tenemos nuestra consulta de psicólogos infantiles en Bilbao. Puede ponerse en contacto con nosotros si lo desea a través del formulario, teléfono o email.

Fuente: laopiniondemalaga

 

12