Muchos padres y madres se sienten sobreexigidos. Hoy en día hay muchos niños y niñas que llevan deberes a casa para realizar con sus aitas. Estas situaciones quizá tengan que ver con fomentar la colaboración entre el hogar y la escuela. Sin embargo, acaban produciendo todo lo contrario. Este tipo de situaciones, si se producen en exceso, terminan por producir una sensación de hastío. Además los aitas y amas muchas veces no tienen las capacidades o el nivel de conocimientos para poder echarles una mano a los niños. No es tan sencillo. No se puede saber de todo.
Vivimos en una época social en la cual todo debe ser perfecto. La felicidad debe imperar. Padres y madres deben hacer de todo, y hacerlo bien, en tan sólo las 24 horas que tiene el día.
Tareas extraescolares
Es importante que en el hogar se valore, y se apoye lo propuesto desde la escuela. De hecho es muy importante para los niños y niñas sentir que los padres valoran el colegio.De hecho sería muy favorecedor que los aitas y las amas pudieran fomentar la lectura, la creatividad, etc. Sin embargo a veces se encuentran con una imposibilidad de hacer tal cosa dado que el listado de deberes es eterno. Esto se une a algo comentado en otras ocasiones, y es la necesidad de que los niños y niñas hagan tareas extraescolares. A veces cuesta renunciar a algunas actividades, pero sería necesario para evitar esta saturación.
Mostrar la incapacidad
Es muy importante poder mostrar las propias incapacidades, así como las renuncias, a los hijos. Cuando se intenta llegar a todo, se va introduciendo la idea en ellos de que todo es posible. Y esto genera frustración. Evidentemente, a veces el sistema educativo no ayuda. No obstante, sí que es útil ser honestos y ser modelos de tolerar las frustraciones y las dificultades propias. Tan sólo de esta manera los niños y niñas lo podrán hacer con las suyas.
Fuente: elpais.com